jueves, 1 de diciembre de 2016

Visita al Territorio Vetón: Yecla la Vieja y Las Merchanas

El domingo 30 de octubre nuestra Asociación organizó una visita a los dos yacimientos que forman parte del Territorio Vetón, Yecla la Vieja y Las Merchanas. Se trata de dos yacimientos originalmente vetones que sufren cambios con la conquista romana.

Con esta visita hemos querido dar a conocer entre los guinaldeses tanto estos interesantes yacimientos, como en qué podría convertirse Irueña tras numerosos trabajos arqueológicos y de restauración.

La visita comenzó a las 10:00 h. en el Castro de Yecla la Vieja; durante toda la mañana disfrutamos de un agradable paseo por los restos del antiguo poblado vetón; desde un principio nos llamó la atención la gran muralla, que llegó a alcanzar los 5 metros de altura y las piedras hincadas que observamos a su alrededor.


Mª Jesús, la guía de Territorio Vetón nos llevó hacia la parte exterior, donde se encuentra la necrópolis, en la que pudimos ver algunas de las tumbas excavadas. Dentro del recinto nos dejaron impresionados los distintos grabados, que pudimos ver por todo el yacimiento, especialmente el de la cierva amamantando a su cervatillo.

Tras la visita al castro nos acercamos al pueblo para disfrutar de los recursos audiovisuales y expositivos que nos ofrece el aula arqueológica; además encontramos numerosas piezas arqueológicas originales, entre las que destaca un maravilloso ejemplar de “verraco”, y gran número de estelas funerarias romanas.


Después de la comida visitamos el yacimiento de Las Merchanas, que al igual que el de Yecla tiene un recinto amurallado y un espectacular campo de piedras hincadas. Durante estas visitas y gracias a las explicaciones de la guía de Territorio Vetón pudimos acercarnos al tipo de vida de la Segunda Edad del Hierro y apreciar los cambios que tuvieron lugar en los poblados debido a la conquista romana de la Península Ibérica; visibles especialmente en el estrechamiento de las puertas de las murallas.

Con la visita a Las Merchanas finalizamos nuestra excursión ya que el buen tiempo, los espectaculares enclaves y la fantástica compañía y guía hicieron que ambas visitas se extendieran más de lo previsto.

Dejamos pendiente para futuras visitas la Sala del Conde en Lumbrales.